Mi salón está mustio y triste porque mis claveles están enfermos. Se lamentan de haber perdido su color brillante y languidecen doloridos a pesar de la primavera. No llores clavel mío que pronto volverá un color rosa a colorear tus mejillas y tu sonrisa volverá a brillar a la luz del sol, bonita, como tú eres, la flor más bonita de mi jardín.
jueves, 11 de abril de 2013
lunes, 8 de abril de 2013
Las ovejas de la tía Loren
Mi tía Loren tiene unas ovejitas guapas que se cansan de estar encerradas y, con tanto peso como tienen encima, no me extraña que les guste salir a estirar un poco las piernas. Nadie quiere la lana con la que están vestidas así que tienen que aguantarse con ella puesta hasta que se les cae sola. Por eso, supongo yo, la tendrán tan roñosa. Espero que no se hayan constipado de tenerla mojada tantos días por la lluvia.
martes, 2 de abril de 2013
Día de lluvia en la Vera
Llueve de manera incansable en estos días de primavera que habíamos casi olvidado. Las nubes bajan por las laderas silenciosas, besando con su humedad los brotes verdes de los árboles. Parece difícil salir pero el agua que encharca el suelo y se desliza por los tejados no ha impedido encender el fuego ni ha destruido nuestro ánimo porque la belleza también existe en los días fríos.
Yo siempre recordaré este día en el que la lluvia desbordó los arroyos como un día hermoso en el que disfruté de la lluvia tras los cálidos muros de una casa de cuento y de la mejor compañía imaginable.
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